El Guardés se hace con un diamante en bruto con el fichaje Júlia Nuez

El Mecalia Atlético Guardés se ha hecho con una de las promesas más sólidas del balonmano español. Júlia Nuez jugará en A Guarda la próxima temporada. Una apuesta en firme por ambas partes. La entidad miñota está convencida de que incorpora a una jugadora llamada a marcar las diferencias en la Liga a medio plazo. Por su parte, la joven primera línea catalana de 18 años ha rechazado propuestas de innumerables equipos para venir a O Baixo Miño desde el Sant Quirze y vivir su primera experiencia fuera de casa en la desembocadura del Miño.

Con Nuez, el Guardés incorpora mucho futuro. Pero también presente. Pese a que su equipo descendió, la lateral de Cerdanyola fue uno de sus principales activos. Anotó la nada desdeñable cantidad de 73 goles y, sobre todo, se acostumbró al ritmo, la fuerza y la intensidad de la División de Honor en su temporada de debut en la máxima categoría. Ahora da el siguiente paso en su incipiente carrera incorporándose a un equipo que le permitirá disputar competición europea y pelear por estar en la zona noble de la tabla.

Júlia Nuez es una jugadora de una envergadura muy notable. Mide 1,81 y su proceso de crecimiento aún se tiene que completar. Su físico le permite disponer de un poderoso lanzamiento exterior y una interesante capacidad defensiva. Pero es su inteligencia dentro del 40x20 la que le permite sacar rédito a ese poderío. Si las defensas se abren para evitar que las castigue desde fuera, la catalana conecta con la pivote con mucha facilidad o abre espacios para sus compañeras. Y todas estas cualidades, claro, presentan un enorme margen de mejora. Gracias a ellas se ha convertido en una fija en la selección júnior, con la que hace unos días ha ganado el Trofeo 4 Naciones de Alemania junto a su nueva compañera en A Guarda, Elena Amores. A la vuelta, se ha concentrado con la absoluta en Cantabria para integrar el grupo de 32 jugadoras que José Ignacio Prades ha convocado para hacer la preparación previa a los Juegos del Mediterráneo.

Desde esta concentración de las Guerreras, Júlia explica a la perfección sus sensaciones en las primeras horas como jugadora del club. “Recibir la llamada del Guardés ofreciéndome formar parte de este proyecto es todo un sueño para mí”, destaca Nuez, que con una facilidad de palabra impropia en una persona de 18 años analiza el proceso de su fichaje. “Poder ser una pieza más de un equipo como este, rodeada de jugadoras de primer nivel y en tan solo mi segundo año como jugadora de División de Honor, era algo que no podía rechazar de ninguna forma”, sostiene la lateral de Cerdanyola, que confiesa que le hace “mucha ilusión jugar en Europa” y que su primera experiencia fuera de casa le supone “un reto muy importante” a nivel vital.

“Nunca pensé que me podría llegar todo esto con solo 18 años. Sin duda me ayudará a seguir creciendo como jugadora y como persona”, resume Júlia, que ya está deseando jugar con la parroquia guardesa empujando. “De todos lados me han llegado muy buenas referencias del club y del pueblo. Y también de la afición. Ya la he disfrutado muchísimo en contra, así que no me quiero imaginar cómo será tenerla a favor”, concluye.

Para Abel González, el Guardés incorpora una jugadora “con mucha juventud y proyección”, que “va a ayudarnos” en prácticamente todas las facetas del juego. “Su punto fuerte es la capacidad de lanzamiento exterior, que nos va a venir muy bien. Después es buena conectando con pivote. Son sus características principales a nivel ofensivo”, analiza el asturiano, que considera que Nuez “trabaja bien de brazos” en la fase defensiva.