El Atlético Guardés vence al Elche (20-17) en un partido muy igualado y persigue de cerca el primer puesto

Tras un inicio complicado, en el que el Elche consiguió tomar la iniciativa y ponerse por delante, el equipo de Ana Seabra fue creciendo con el paso de los minutos hasta conseguir llevarse los dos puntos de A Sangriña.

Durante el primer cuarto del partido, las visitantes se impusieron en el marcador, llegando al minuto 15 con un 5-6 favorable al conjunto ilicitano. Sin embargo, el Guardés, arropado por un Inferno que no dejó de animar, fue mejorando sus sensaciones y haciéndose fuerte a nivel defensivo. En esa faceta, destacó la portera francesa Amandine Balzinc, que realizó 13 paradas durante todo el encuentro (4 de ellas a penaltis).

Tras lograr poner las tablas en el ecuador del primer tiempo, dos lanzamientos de 7 metros darían al Guardés una doble ventaja que les otorgó tranquilidad y confianza. Sin embargo, Joaquín Rocamora solicitó un tiempo muerto y, en el tramo final, su equipo reaccionó y consiguió poner un 10-10 al descanso.

En el inicio de la segunda mitad, la contribución goleadora de ambos equipos en los primeros minutos fue escasa. Durante los primeros siete minutos, solo subieron al electrónico dos goles de Jazmín Mendoza para el Guardés y, uno desde los 7 metros, por parte de Vanesa Rubio, para el Elche. El partido seguía igualado y con la sensación de que podría caer para cualquier lado pero, tras un fuerte golpe de Rosa Armenteros sobre Ceci Cacheda el árbitro expulsó a la jugadora visitante. Las jugadoras de Ana Seabra aprovecharon la superioridad numérica para lograr un parcial de 3-1 y tomar suficiente ventaja (15-12) de cara al tramo final de partido.

Finalmente, el Guardés resistió las acometidas de un Elche que intentó sacar algo positivo de A Guarda hasta el final, y logró vencer por 20-17.