Tensión política en A Guarda: el PSOE critica riesgos económicos en el nuevo intento de licitación de la piscina municipal

El Grupo Municipal Socialista de A Guarda se abstuvo este martes en la votación sobre la nueva licitación de la reforma de la piscina municipal, al considerar que la propuesta del gobierno local carece de garantías financieras y transparencia. El grupo socialista sostiene que no puede respaldar un expediente que incluye el levantamiento de un reparo suspensivo de intervención, especialmente cuando los propios informes técnicos alertan de graves riesgos económicos para las arcas municipales.

Según el PSOE, el problema de fondo es que no está asegurada la financiación total de la obra, ni tampoco los plazos de ejecución exigidos por la subvención europea de 1,5 millones de euros. A ello se suma, según han denunciado, una actuación por parte del gobierno local que consideran “gravemente irresponsable”.

Desde el grupo socialista aseguran que el ejecutivo municipal mintió a la oposición sobre el origen del dinero necesario para cubrir el sobrecoste de más de 500.000 euros generado tras la revisión del proyecto. “Nos dijeron que esos fondos vendrían del Fondo de Cooperación Local de la Xunta, pero eso no era cierto. No hay resolución ni concesión firme, solo una solicitud presentada, y eso no equivale a tener el dinero disponible”, explican.

“Nuestro grupo no va a convalidar una chapuza ni una improvisación. Y tampoco vamos a asumir responsabilidades legales por levantar un reparo de intervención que claramente advierte que este procedimiento no cumple los requisitos”, sentencian desde el PSOE, deslindando cualquier posible responsabilidad futura.

La portavoz socialista, Fátima Rodríguez, aclaró que la abstención no significa oposición a la reforma de la piscina, sino un rechazo a “esta forma de gobernar”. “Decimos sí al proyecto, pero no a esta gestión desordenada. La ciudadanía merece obras bien hechas, con financiación asegurada y sin riesgos para el presupuesto municipal”, afirmó.

Rodríguez también recordó que toda esta situación podría haberse evitado con una mejor planificación por parte del gobierno local: “Si hubiesen actuado con antelación y rigor, no estaríamos en este punto. La falta de seriedad tiene consecuencias, y quienes pagan el precio son los vecinos de A Guarda”.

El otro grupo de la oposición también se abstuvo, lo que evidencia el aislamiento político del gobierno local en una votación decisiva para un proyecto que, según coinciden los distintos grupos, debería haberse gestionado con consenso y no en medio de la polémica.